Es menester aclarar que la crisis económica, por la que está pasando España, ha aumentado las ideas separatistas de una de sus más famosas y la más visitada de sus comunidades autónomas, me refiero a Cataluña.
Efectivamente, es la región donde se encuentra una de las ciudades más cosmopolitas de todo el mundo, Barcelona. Es el lugar donde habitan más de 7,5 millones de personas, es la zona más industrializada de España, es la sede de uno de los mejores equipos de fútbol: el FC Barcelona, ahí han visto nacer a grandes artistas como Salvador Dalí, Antonio Gaudí o Joan Miró, quien no ha escuchado a Joan Manuel Serrat, Jarabe de Palo, Mónica Naranjo, Sergio Dalma o Estopa, quien no ha oído hablar de los castellers o de la sardana. Ahí es donde más se habla catalán, de hecho el español pasa a un segundo plano, quien no ha visto la majestuosa arquitectura de la Sagrada Familia.
Bueno, todas estas grandes insignias de esta región, en su fervor más político y aprovechando la crisis y la fiesta del 11 de septiembre (Día Nacional de Cataluña), han aprovechado para relanzar de nuevo el debate entre los catalanes y entre los que no, la idea separatista de Cataluña de España.
Esta idea no es tan novedosa como parece, en toda la historia catalana, esta idea siempre ha persistido, pudieramos decir que desde 1714, cuando las tropas catalanas pierden frente al ejército del Rey Felipe V y forman parte del reinado. Pero estas ideas separatistas se han presenciado en los últimos años con mayor interés entre los catalanes.
En 2011 y 2012, han sido los años en los que se ha hecho más presente la idea de independencia de Cataluña, esto lo demuestran las encuentas en las que más del 30% de los catalanes desea ser independiente de España o más del 25% prefiere ser una Federación.
Si se llegara a dar la formación de una Federaicón, estas serían las regiones que posiblemente se podrían adherir a Cataluña: La Comunidad Valenciana, Islas Baleares, Rosellón, Francia (Cataluña del Norte), parte de Murcia y Aragón, una región de Cerdeña, Italia.
Como dato, el 13 de septiembre de 2009, se llevo acabo un referendúm en el que se le preguntaba a la población catalana si deseaban la independencia de Cataluña, un abrumador 95% dijo el SI a la independencia.
Fuera de estas ideas, debemos ser objetivos y verificar que para que en un escenario como estos sea satisfactorio como una nueva nación, debe tener liquidez y sostentabilidad como Estado, además de conflagrar redes diplomáticas a nivel internacional; y ciertamente ninguno de estos principales elementos podría dar la bienvenida a una nueva Cataluña, analicemos por qué:
He de decirles, que Cataluña es de las Comunidades Autónomas más endeudas de España actualmente, tan es así que Cataluña solicitó a España, el pasado 28 de agosto, a través del Fondo de Líquidez Autonómico, un rescate de tan sólo € 5,023 millones apenas para cubrir sus deudas. Eso si con ideas muy independentistas, pero dependientes de los rescates que otorga el Gobierno Español, un poco incoherentes, no?
El reclamo actualmente, es que una importante parte del PIB catalán, va destinado a los impuestos que solicita el Gobierno español, pero si la Generalitat de Cataluya se separa de España ahorita, el déficit que tendrían sería inmenso, más en el que están parados ahorita.
Además debería construir toda una infraestructura como país, una oficina tributaria y ya no dependiente de España.
Amsterdam no ve con buenos ojos, por un lado la separación de Cataluña de España en plena reseción económica y mucho menos cree favorable el voto unánime a favor de aceptar una solicitud como nuevo miembro de la Comunidad Europea. En primer lugar por que necesita el voto unánime de los países miembros, donde España en su lugar al igual que Francia no aceptarían dicha solicitud.
Pero he de decirles también, que la Constitución Española tiene un mega freno para estos eventos, los representantes de todas las comunidades autonómicas en las cámaras, deben dar su voto unánime para que Cataluña se separe de España.
Mientras, la televisión catalana, principalmente TV3, señala que la opción para una mejora económica de la región, se debe centrar en la seseción, ya que se obtendrían todos los recursos que se mandan a la Corona y al Gobierno español.
El mismo Presidente de la Generalitat de Cataluyna, Artur Más, junto con su partido CiU (Convergència i Unió) es el principal personaje para apoyar la independencia, sólo que partidos nacionalistas como PSC (Partido Socialista de Cataluña) y PPC (Partido Popular de Cataluña) se niegan rotundamente por esta idea separatista y prefieren sacar la bandera nacionalista de España.
Otros partidos como ERC (Esquerra Republicana de Catalunya) y SI (Solidaritat Catalana per la Independència) son partidos minoritarios en la Cámara de Cataluña pero que son más radicales y desean con todo fervor la separación.
El panorama político no termina ahí, cuando el Rey Don Juan Carlos, a dos días de la mega marcha en Barcelona a favor de la independencia de Cataluña, manda una carta oficial, aclarando que en estos momentos más que nunca el pueblo español debe estar unido y que una crisis económica, no debe dar rienda sueltas a ideas separatistas. Estas palabras molestaron aún más a los catalanes, quiénes en varias ocasiones le han mostrado su desagrado al monarca español.
Como vemos, de todas a todas encontramos dificultades, económicas, políticas, migratorias, civiles, electorales, comerciales, fiscales, para que Cataluña logré con éxito su cometido de independencia, pero el tiempo y la historia nos dirá que pasará.
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